domingo, diciembre 23
Ocurrencia inaudita - Poesía libre
Surtiéndonos tu amor de Trinidad
Queriendo inaugurar lo inaudito en lo pequeño
Vienes eligiéndonos la Vida
Despojado en lo que somos para sernos
Atenuando tu divinidad
Te nos regalas
Hoy
En el tiempo del estío
Con el albor de la hierba quebradiza que vamos siendo
De verdes amarillos y rojos inestables
Propagados en esta tierra indigente
Que prepara sus cosechas de América pobre y desprendida
Te nos allegas en el llanto nuevo
De niño hermoso y Dios chiflado en el Amor
Trabado en carne y sangre acontecida en lo imposible
A los pezones lechosos de María
Entreverado
Y te nos quedas
Aquí
En los brazos de cuna en tiempo y percepción
De esa niña parturienta
Empeñada en esculpirte la lengua de lo nuestro en las entrañas
Sol perecedero
Dios pequeño
Templando en sus abrazos de hembra y humanidad ineludible
Aprenderás los dialectos de tu pueblo expectante
Peregrino en sobresalto de misterio
Alzando tu rostro al acabamiento irrevocable del terruño tenue
Sostenido en nuestra tierra de origen negro, indio y azabache
Aquí
Ahora
En sus besos acunando tu sueño de niño en pañales
Y tus manitas todavía húmedas de placenta en tránsito de humanidad
Tan precario
Misterio Inefable
Retoñando en el pulsar de lo breve
Para hundirnos en el centro de tu Inmensidad
Valentina, Navidad de 2007
martes, diciembre 11
Indagación - Verso libre
Te reclaman y refutan estas entrañas de identidad perdida
Gritan tu dorso abarcándoles la piel niña sin preguntas
Añoran el tiempo de las raíces tumbándoles la memoria en el presente
Y te odian hasta el odio de Dios porque no pueden sepultarte
¿Cómo es el rostro de las que asoman en mi ventana?
¿A quiénes trinan allá fuera los girasoles?
¿En quiénes reposan los brazos largos de sol adormilado?
“Somos tú” Vociferan en mis desvelos multitudes trashumantes
“Todas las matronas de cuajo vaginal y fervor místico”
“Las que ultimaron a besos a sus vástagos recién paridos”
“Esas escribanas de laberinto en tornasol quebradizo”
Te buscan contrahechas las que somos yo misma en lo lejano
Suplicando unos seudónimos de cepa en cielo y deidad en muerte
Como abalorios abrasados en sus delirios de esencia extática
Refutándose sobre sí mismas las serpentinas contrahechas
Valentina, 11 de diciembre de 2007